Unos investigadores respaldados por la Unión Europea estudiaron distintas prácticas de gestión ecológica en explotaciones ganaderas escocesas. Determinaron que la adopción de prácticas ecológicas podría ayudar a incrementar hasta un 7 % los beneficios de las explotaciones.
La nueva investigación, llevada a cabo como parte del proyecto financiado con fondos europeos LIFT, ha demostrado que las prácticas ecológicas son el camino a seguir para los productores agropecuarios europeos. Realizada en el Rural College de Escocia (SRUC), Reino Unido, socio del proyecto LIFT, sugiere que tales prácticas ayudan a los productores agropecuarios a incrementar sus beneficios y a cumplir objetivos agropecuarios sostenibles.
La investigación consistió en una evaluación económica de cuatro prácticas distintas de gestión ecológica aplicadas en explotaciones ganaderas de Escocia. Se recopilaron datos de 31 explotaciones como parte de una encuesta realizada a ganaderos escoceses a principios del año 2020.
La repercusión económica de las cuatro prácticas ecológicas se analizó después mediante el uso de un modelo económico a escala de explotación denominado ScotFarm. Dicho modelo se basa en la suposición de que todas las actividades de la explotación están interrelacionadas y sirven para maximizar los beneficios de esta.Tal y como se informa en una noticia publicada por el sitio web «FarmingUK», el estudio pretendía obtener información sobre si las prácticas de gestión económicamente viables podían dar lugar a una mejor adopción por parte de los productores agropecuarios. Descubrieron que un par de medidas potencialmente fáciles de adoptar, a saber, convertir una parte de la superficie de la explotación en zona ecológica y reducir sus insumos externos, podrían generar un aumento de los beneficios de la explotación de hasta el 7 %. Ahora bien, determinados planteamientos ecológicos, como reservar superficie de la explotación para plantar árboles y cambiar a un sistema de explotación ecológico, requieren inversión de capital, lo cual resulta difícil para los productores agropecuarios sin ningún apoyo financiero.
El doctor Shailesh Shrestha del SRUC declaró en la misma noticia: «El gobierno escocés ha presentado un plan sobre cambio climático a largo plazo para conseguir una Escocia más limpia, ecológica y sana para 2032. La adaptación de las prácticas de gestión agroecológica por parte de los productores agropecuarios es un posible enfoque para respaldar estos planes. Sin embargo, una cuestión crítica es el impacto económico de la adopción de estas prácticas. Nuestra investigación proporcionó una instantánea del impacto económico de una serie de prácticas de gestión ecológica y los retos económicos que afrontan los productores al adoptar dichas prácticas en las explotaciones. Aun así, una mejor comprensión de la viabilidad económica de estas prácticas de gestión agroecológica sería muy útil para maximizar la adopción de estos métodos de gestión por parte de la comunidad rural escocesa».
El sector agropecuario debe satisfacer las cambiantes necesidades medioambientales y de consumo del mundo. La mejor comprensión de los principios ecológicos está cambiando la opinión de los ciudadanos sobre cómo funcionan las explotaciones. Sin embargo, dado que aumenta el interés por las prácticas ecológicas, necesitamos determinar qué aportan a las actividades agropecuarias, la forma de aplicarlas mejor y cómo las adoptarán los agricultores y ganaderos que estén dispuestos.
En el proyecto LIFT (Low-Input Farming and Territories - Integrating knowledge for improving ecosystem-based farming) se ha tratado de determinar los beneficios de las explotaciones ecológicas en la Unión Europea y comprender cómo los factores socioeconómicos y políticos afectan a la adopción, el rendimiento y la sostenibilidad de las prácticas de gestión ecológica a distintos niveles, que van desde una explotación hasta todo un territorio.
Para más información, consulte:
EN
CS
DE
ES
FR
HU
IT
PL
PT
РУ
SK
TR
УК
AR
中文
