¿Cómo pueden las explotaciones agrarias familiares irlandesas ser más viables y cómo se puede alentar a las generaciones más jóvenes a comprometerse con la empresa familiar? Gracias a la agricultura ecológica, según un nuevo estudio financiado con fondos europeos.
Las explotaciones agrarias familiares desempeñan un papel fundamental en el desarrollo rural y el sector agrario: permiten que las economías rurales sean más competitivas y sostenibles, garantizan la seguridad alimentaria, mejoran los medios de subsistencia y protegen el medio ambiente. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura ha calificado a los agricultores familiares como los agentes del cambio que el mundo necesita para eliminar el hambre, lograr un planeta más resiliente y un desarrollo sostenible.
Por desgracia, el número de explotaciones agrarias familiares está disminuyendo en toda Europa a medida que los agricultores se enfrentan a problemas relacionados con el cambio climático, la viabilidad, los cambios estructurales y la sucesión de la explotación a la siguiente generación. Los jóvenes agricultores a menudo no se hacen cargo de sus explotaciones familiares debido a problemas relacionados con la viabilidad de la explotación y la falta de prácticas agrarias innovadoras, como la agricultura ecológica.
Aunque la práctica de la agricultura ecológica ha crecido en la mayor parte de Europa, en Irlanda su progreso ha sido limitado hasta ahora. Un nuevo estudio realizado como parte del proyecto RURALIZATION, financiado con fondos europeos, analiza el impacto de la agricultura ecológica en la viabilidad y la sucesión de las explotaciones agrarias familiares irlandesas. Los hallazgos de la investigación se han publicado en la revista «Sustainability».
Los investigadores de la Universidad Nacional de Irlanda en Galway (NUI Galway), entidad socia del proyecto RURALIZATION, llevaron a cabo un estudio de casos cualitativo con un grupo de agricultores ecológicos irlandeses que participan en el proyecto de la Asociación Europea de Innovación en materia de Productividad y Sostenibilidad Agrícolas (EIP-AGRI, por sus siglas en inglés) Maximising Organic Production System (MOPS). El estudio de casos consistió en una estrategia gradual, que comenzó con un análisis documental, pasó a entrevistas semiestructuradas y un grupo muestra elegido, y luego a una sesión final de retroalimentación.El estudio mostró que la adopción de prácticas innovadoras no solo hace que las explotaciones agrarias sean más viables, sino que además alienta a la nueva generación de jóvenes agricultores a tomar el relevo y continuar con la tradición agraria de la familia. «Lo que también se ha puesto de manifiesto es que hay oportunidades, no solo en la trayectoria de desarrollo de los productores ecológicos existentes, sino, lo que es más importante, que la agricultura ecológica puede actuar como un catalizador para atraer nuevos participantes al sector agrario», afirman los autores en el estudio. «Este es un aspecto muy importante, ya que con seguridad se convertirá en un contribuyente vital para garantizar que se cumplan las ambiciosas y desafiantes proyecciones de crecimiento para la industria establecidas en la estrategia "De la Granja a la Mesa" de la Unión Europea».
Según los investigadores de la NUI Galway, el modelo presentado por el proyecto MOPS: «Puede respaldar una mayor sostenibilidad económica y ambiental de la horticultura ecológica en Irlanda. La producción colaborativa que apoya las explotaciones agrarias ayuda a los productores hortícolas a adaptar su producción a las demandas del mercado. El enfoque en el uso cada vez mayor de cultivos de cobertura y la minimización de los aportes de nutrientes externos asegura una mayor sostenibilidad ambiental».
El estudio de casos del proyecto RURALIZATION (The opening of rural areas to renew rural generations, jobs and farms) también mostró cómo gestionar los problemas relacionados con la viabilidad de las explotaciones a través de la cooperación grupal puede ayudar a mejorar la viabilidad, con beneficios adicionales del intercambio de los conocimientos derivados y la innovación. Los autores afirman: «Otro hallazgo importante es la transición hacia la agricultura ecológica del sucesor que regresa. Esto es importante para la política. El apoyo específico que incentiva al sucesor que regresa podría atraer de nuevo a la agricultura a aquellos que se han ido para buscar educación y empleo en otro lugar. Este puede ser un camino a seguir más amplio para la política, que identifica diferentes tipos de sucesores y nuevos participantes, y apunta a brindar el apoyo adecuado a sus necesidades».
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